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¿Qué hacen esos descerebrados esquiando y haciendo guerras de bolas de nieve en la Puerta del Sol? – escuchaba estos días a la gente-.
Filomena, además de mucha nieve, nos ha dejado un montón de vídeos e imágenes super divertidas.
Otra cosa no tendremos los españoles, pero sentido del humor nos sobra.
Y ojalá no nos falte nunca.
De hecho, siempre digo que el humor es una de mis mejores herramientas y que no sé dónde estaría ya sin él.
La nevada del fin de semana
El sábado pasé el día entero estudiando y por la noche estuve un rato viendo Tiktok antes de dormirme.
Había muchísimos videos de la nieve. Gente haciendo el ángel, bailando la Macarena en la Puerta del Sol, tirándose a bomba en la nieve, esquiando en rampas, practicando tiro de trineo con perros, otros en barca arrastrada por un 4×4 y hasta unos T-Rex que no entendí muy bien qué tenían que ver con la nieve, pero oye, que tendrían ganas de sacar el disfraz.
A ratos pensaba “Qué poco talento tienen”.
Eso se dice en mi tierra cuando alguien tiene poco sentido común. Y es que, obviamente, seguimos con restricciones de movilidad por covid y ponerse en riesgo de esa forma, tanto por contagios como por fracturas y accidentes, no fue ninguna buena idea. Fue irresponsable.
Pero también a ratos se me escapaba la risa y seguidamente me ponía un poco triste mientras pensaba “Joder, la gente está hasta las pelotas. Necesitan un respiro. Ya vale, pobres. Ya vale”.
Y sí. No se puede apretar y apretar y apretar… y que todo se aguante.
Me dio una ternura infinita ver a tanta gente sacando su niño interior, resarciéndose por tanta restricción, tanto covid y tanta mierda. Que vamos a llevar un año con esta movida, que se dice pronto.
Que en la mayor parte de España no habíamos visto nunca nevar así. Vaya, yo no recuerdo en Zaragoza una nevada como esta.
Y todos necesitamos un respirito, como el de las vacaciones de verano (que este año tampoco tuvimos), para cargar pilas, coger aire y volver a nuestras rutinas durante meses.
La gente encontró la excusa perfecta para saltarse las normas por un día.
¿Irresponsable? Sí.
Pero quizá necesario también.
La gente habla mucho de la importancia de cuidar nuestra salud, ahora más que nunca.
Pero ¿quién piensa en nuestra salud mental?
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